Quantcast
Channel: AmaBuscaSumisoVerdadero
Viewing all articles
Browse latest Browse all 339

El sumiso boomerang

$
0
0


Este es el que vuelve a aparecer al cabo de semanas, meses o años para decir que se acuerda de ti, cuando en su momento lo descartaste porque, entre otros motivos, notaste que tú, como mujer y como persona, le interesabas más bien poco, o no era su prioridad esa faceta tuya frente al hecho de ser Ama. Así que lo que quiere decir en realidad es que echa de menos la poca o mucha atención que le dedicaste (para un novato total, un intercambio de correos ya es muchísima atención) y la oportunidad que creyó vislumbrar cuando pasaste del “hola” con él.


Ejemplo real. Fulano x, de vuelta del mundo vainilla tras mil batallas de faldas y varias relaciones convencionales que no cuajan ninguna (no por culpa de él, ejem...), llega de rebote al excitante mundo femdom que parece prometer nuevos e ilimitados placeres por descubrir. Contacta con un Ama (yo en este caso) esperando que lo toque con una varita mágica que lo transforme en lo que no es, ni nunca fue, ni nunca será. Bueno, en honor a la verdad no habla de ser o querer ser sumiso, lo que busca es una que lo haga sentir como una puta (me horroriza que el machismo se infiltre en la DF como ya explicaré), porque le da morbo rechazar a la legión de mujeres que le van detrás por lo guapo que es (todo esto no es ironía, es que lo decía así de literal) para irse con una que le dé caña. Es cierto que detrás de un tío creído hay una panda de mujeres que babean a su paso y lo tienen muy mal acostumbrado. Feo no era (“logré” que me enseñase la foto tras insistir en que no hablo con gente sin rostro y al fin me hizo el inmenso favor...), aunque para gustos los colores, y un hombre que presume de guapo pierde muchos puntos ante mí, y más allá del físico hace falta que también sea interesante por el interior. Y en cualquier caso, el hecho de que a un hombre le pueda dar morbo estar con un Ama no lo convierte en sumiso, y en este caso creo que esa sumisión no iba a durar más allá de dos telediarios. Yo desde luego no veía la sumisión más allá de que me hablase de usted, y eso se lo tuve que “prohibir” porque chirriaba con todo lo demás.


Pues bien, desde su -evidente para mí- vainillismo (por llamarlo de alguna manera que lo distinga de la sumisión), hace y dice todo lo que me puede sacar de quicio. Y lo logra, claro. Lo de sacarme de quicio quiero decir. Impaciencia, interés exclusivo en mi faceta dominante, echarse para atrás cuando quiero una prueba real de su palabrería porque, aun siendo impaciente como es, le dan ataques de retroceso, temor y duda y siente que no le viene bien justo entonces demostrar lo genial que es como sumiso, y muchas otras cosas más.


Aparte, o al mismo tiempo, noto una incompatibilidad personal tremenda. Creo que es más bien a la vez, porque si alguien no me entiende ni me “capta”, aunque jure lo contrario con tal de intentar pillar cacho, ni sigue el ritmo que marco yo, o le da la vuelta a lo que digo o mil vueltas a todo, en fin, que si su ACTITUD dista un mundo de ser la adecuada, pues más claro no puede estar que no hay relación posible. Este en concreto, durante uno de los intentos de mantener una simple charla que tuve, puso la guinda al pastel y acabó con la gota de paciencia que me quedaba a esas alturas, soltándome la siguiente lindeza: “si piensas eso, es que eres tonta”. Da igual las veces que me pidiese luego perdón, algo así no se puede pasar por alto. No es un desliz, es algo que solo diría un chulito que no respeta a las mujeres. Posiblemente nunca me lo hubiera soltado en un correo donde es fácil escribir y borrar y pensar lo que se supone que hay que decir para quedar bien, pero en el “directo” del chat es más difícil controlarse y no dejar que salga a la luz la verdadera forma de ser. Así que le dije adiós y buena suerte.


Pero claro, mientras que yo los borro de mi memoria pronto, ellos me siguen leyendo o me vuelven a leer al cabo del tiempo y sigo estando “ahí” de alguna manera. Cuando me llega un mensaje de estos fantasmas del pasado, tengo que hacer un esfuerzo para recordar ese nombre y ese email, debido al tiempo transcurrido y a lo fácil que me resulta olvidar a quien no me produce buena impresión. Pero encima se dirigen a mí como si hiciera una hora de nuestra última charla y dando por sentado que me acuerdo perfectamente de quienes son. Luego ya me vienen los recuerdos y de hecho no olvido la mala impresión o la falta de conexión. Y lo grave es que les resbala que ellos no sean lo que busco, sino que siguen insistiendo, como digo, a veces al cabo de mucho tiempo como este ejemplo, a ver si se me ha olvidado o paso por alto sus “defectillos” y vuelta a empezar. Pero estos casos me producen una huella imborrable, y no en el sentido positivo precisamente. Así que he llegado a la conclusión de que lo mejor para que un boomerang no vuelva es no molestarte ni en echarlo. El silencio es lo mejor, ya irá a ponerse en manos de otra, que tampoco lo aceptará, motivo por el cual vuelve a ti, claro, porque lo van soltando como a una patata caliente. Ay, mundo cruel. O se dan cuenta de lo complicado que es pillar cacho-Ama. Sea como sea, lo que no me creo es que aparezcan para saludar y punto.


Y a ti, por si realmente me lees (si no es el caso te quedarás sin otra respuesta que esta), te digo que ojalá también te vaya todo genial, ya que esperas que esa sea mi situación, y que no comparto lo que dices de sentirte orgulloso del tiempo que te dediqué, no creo que lograses nada (aparte de irritarme porque no hablabas “mi mismo lenguaje”) ni que te sirviera para evolucionar en tu hipotética sumisión. Sigues soltando cosas extrañas como lo de no saber cómo dirigirte a mí, pues chico, como a una mujer normal, aunque claro, poco morbo te podría dar entonces escribirme... Pero si a pesar de todo guardas buen recuerdo y aprecias a “una mujer como yo” sin conocerme más allá de una pantalla, pues nada, puedo seguir siendo “toda tuya” cada vez que leas mi blog... Cuídate y que te vaya bien rompiendo corazones de pobres vainillas que se conforman con unos ojos bonitos.


No creáis que disfruto con estas cosas ni pretendo ser cruel, ojalá sacase al menos amigos de todo esto, ojalá este hombre fuera como el protagonista de Orgullo y prejuicio (hay libro, películas y serie por si a alguien le interesa saber de qué hablo, aparte del post que traje por aquí), un buen tipo detrás de una fachada de engreído, y estropeado por haber estado demasiado consentido, pero las historietas quedan para el cine y los libros. Ah y hablando de libros, por supuesto que no espero que a ningún sumiso boomerang le interese el mío. Si a mí me interesase un hombre, sumiso, dominante o astronauta, me leería de él hasta la lista de la compra; pero estoy convencida de que a esos ni les intereso yo ni lo que yo hago, y si me quitan la etiqueta de Ama ya les interesa conocerme el cero por ciento. Y eso se nota a la legua, por eso la cosa no prospera nunca en estos casos, incompatibilidades aparte.No tiene sentido retomar contacto cuando en su momento la cosa no funcionó, y la cosa no funcionó porque el contacto entre dos personas incompatibles no tiene sentido. Algo tan simple y evidente parece que no lo entienden algunos, pero deberían hacerlo y dejar el pasado (y a mí) en paz.

Viewing all articles
Browse latest Browse all 339

Trending Articles